¿Cuándo necesitas consentimiento expreso según el RGPD?
El Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) es muy claro respecto al tipo de consentimiento que se debe obtener cuando se trata de datos personales. El consentimiento expreso es uno de los pilares fundamentales para garantizar que el tratamiento de datos sea lícito. En este artículo, te explicaré en qué situaciones es necesario y cómo puedes obtenerlo de manera adecuada.
¿Qué es el consentimiento expreso?
El consentimiento expreso, según el RGPD, es la manifestación clara y afirmativa de la voluntad de una persona, mediante la cual acepta el tratamiento de sus datos personales. No basta con un consentimiento tácito o implícito; es decir, no se pueden usar casillas premarcadas ni la inacción del usuario como indicativos de su consentimiento.
¿Cuándo es necesario recabar el consentimiento expreso?
1. Tratamiento de datos sensibles
Cuando el tratamiento implica datos de categorías especiales, como los relativos a la salud, la orientación sexual, las creencias religiosas o políticas, el consentimiento expreso es obligatorio. Estos datos son considerados altamente sensibles y, por lo tanto, requieren una protección adicional.
2. Recogida de datos de menores de edad
El RGPD establece que, para el tratamiento de datos de menores, es imprescindible obtener el consentimiento expreso de sus padres o tutores legales, especialmente si el menor tiene menos de 16 años.
3. Tratamiento de datos biométricos
El uso de datos biométricos, como huellas dactilares o reconocimiento facial, para identificar a una persona también requiere el consentimiento expreso del interesado. Estos datos se consideran particularmente invasivos debido a su naturaleza única e irrepetible.
4. Formularios en páginas web
Si tu web recoge datos personales a través de formularios, como los de suscripción o contacto, es esencial que obtengas el consentimiento expreso del usuario antes de almacenar o procesar esos datos. Este consentimiento suele recogerse mediante la aceptación de casillas desmarcadas previamente y vinculadas a la política de privacidad.
5. Uso de cookies y tecnologías de rastreo
El consentimiento expreso también es necesario cuando se utilizan cookies u otras tecnologías de seguimiento que recopilan información personal. Debes informar al usuario de manera clara y detallada sobre qué datos se recogerán y con qué propósito, permitiéndole aceptar o rechazar estas cookies.
6. Datos recopilados para marketing
Si pretendes utilizar los datos personales de tus clientes para campañas de marketing, necesitas su consentimiento expreso, especificando claramente para qué finalidades se utilizarán esos datos. Esto aplica tanto a marketing directo como a la elaboración de perfiles comerciales.
¿Cómo Obtener el Consentimiento Expreso?
Para que el consentimiento sea válido, debe ser libre, específico, informado e inequívoco. Aquí te dejo algunos ejemplos de cómo conseguirlo:
- Cláusulas en Contratos: Incluir una cláusula específica sobre la protección de datos en contratos de servicios, que el interesado debe firmar.
- Casillas de Verificación: En páginas web, usar casillas desmarcadas que el usuario debe marcar para dar su consentimiento.
- Información Clara y Accesible: Proporcionar información detallada sobre el uso de los datos antes de solicitar el consentimiento, asegurando que el interesado pueda tomar una decisión informada.
El consentimiento expreso es una herramienta crucial para garantizar que el tratamiento de datos personales se realiza de forma lícita y respetuosa con la privacidad del interesado. En todas las situaciones mencionadas, es vital que el consentimiento se obtenga de manera clara y transparente, asegurando siempre que el usuario tiene pleno control sobre sus datos personales.
Si gestionas datos personales en tu negocio, asegúrate de cumplir con estas normativas para evitar posibles sanciones y, lo más importante, para proteger los derechos y la privacidad de tus usuarios.
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